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Harry Potter y la cámara secreta (J. K. Rowling)
22 mayo
¡La Cámara de los Secretos ha sido abierta. Enemigos del heredero, temed!
Aunque reconozco que Harry Potter y la cámara secreta (Salamandra, 2002) no es mi libro favorito de la saga, tras releerlo una vez más me sigo quedando petrificada (badumtss) en ciertos momentazos. Jo Rowling sabe cómo escribir un libro genial, con guiños importantes para el final de la saga —que se te pasan por alto cuando lo lees por primera vez, pero que ya estaban ahí, preparaditos—, lo que demuestra una vez más lo maravillosamente organizado que estaba todo.
En este segundo año observamos una pequeña evolución en los personajes, aún siguen siendo niños pero nos dejan sumergirnos más de su interior y vemos a un Harry dudoso acerca de sí mismo y de sus decisiones.
El joven mago se enfrenta a otro apasionante verano con los Dursley, que siguen tan odiosos como siempre, o más, si cabe. Pero en esta ocasión, además de con la soledad habitual y las normas muggles de sus tíos (¡incluso han encerrado a Hedwig!), Harry debe lidiar con que sus amigos de Hogwarts, Hermione y Ron, se han olvidado de él. O eso parece.
En ese momento aparece Dobby, un elfo doméstico que no viene precisamente a charlar con Harry. Viene a advertirle que no debe regresar a Hogwarts, porque algo horrible va a ocurrir ese curso e intenta convencerlo de que no lo haga bajo ningún concepto (y para conseguirlo está dispuesto a cualquier cosa, lesiones y mutilaciones incluidas. Pero, tranquilos, Dobby no mata...).
En ese momento aparece Dobby, un elfo doméstico que no viene precisamente a charlar con Harry. Viene a advertirle que no debe regresar a Hogwarts, porque algo horrible va a ocurrir ese curso e intenta convencerlo de que no lo haga bajo ningún concepto (y para conseguirlo está dispuesto a cualquier cosa, lesiones y mutilaciones incluidas. Pero, tranquilos, Dobby no mata...).
La de la Cámara Secreta es una trama sin desperdicios, un poco más oscura que la del primer libro. Muchas cosas suceden en este segundo año y sí: puede que Harry esté en
el meollo de todas ellas. Algo, o tal vez alguien, está poniendo a todos
los alumnos de Hogwarts en peligro, y nadie sabe quién o qué podría ser. Por si fuera poco, se rumorea por el colegio que la Cámara de los secretos se ha abierto de nuevo y, claro, la intriga se acrecienta.... ¿Y el final? ¡Uf! ¡Impredecible!
Llegamos a conocer más a personajes que ya nos eran familiares por el primer libro, como la familia Weasley, y además, ¡visitamos su casa! Es genial comprobar cómo la vida en La Madriguera se diferencia tantísimo de la de Privet Drive. El contraste entre lo ordenado y aburrido y lo extraño, inesperado (recordemos las explosiones habituales provenientes del cuarto de Fred y George) y cercano. Creo que hay un momento en el que Harry se sorprende porque lo que ve más inusual de todo es precisamente el hecho de que por fin parece gustarle a todo el mundo. Pobre Harry...
Asimismo, me encanta cómo cada personaje aporta cada vez más a la historia. Los comentarios de Ron, las bromas de Fred y George; la astucia, inteligencia y sutileza de Hermione, la valentía de Harry a pesar de estar asustado; la extraña extrañeza de Dumbledore. Incluso personajes secundarios como el señor y la señora Weasley tienen una individualidad y personalidad fuerte. Están todos bien desarrollados y no cuesta en absoluto familiarizarse con todos, como si se tratara ya de viejos conocidos.
Por supuesto aparecen nuevos personajes, el ya citado Dobby, Myrtle la llorona (que se aloja en el
cuarto de baño de las niñas), el ridículo egocéntrico y pretencioso
Gilderoy Lockhart (toda la celebración de San Valentín que organiza te arranca alguna carcajada), Lucius Malfoy (¿podemos hablar ya de sus escenas con Arthur Weasley? ¡Son lo más!) y, sobre todo, comenzamos a ver más a Ginny (la verdadera y genial, no la de las pelis), ya que comienza su enseñanza en Hogwarts.
¿Aún dudas sobre si deberías leerlo? Siete motivos (sí, tenían que ser siete):
¿Aún dudas sobre si deberías leerlo? Siete motivos (sí, tenían que ser siete):
✧Visita a La Madriguera (¡yay!), con la fascinación del señor Weasley con los muggles incluida 🏡
✧ El coche volador 🚘✨
✧ El howler ✉️ (¡gracias a Merlín mi madre nunca me ha enviado uno! 😌)
✧ La escena final 😱
✧ Los monstruos 😯 (algunos, de ocho patas)
✧ Nuevas clases, pociones nunca vistas y más partidos de Quidditch 🙌
✧ Fawkes y Dobby 🔥
¿Y cómo olvidar las sabias palabras del profesor Dumbledore? «Son nuestras elecciones las que muestran lo que realmente somos, mucho más que nuestras habilidades».
¿A qué esperas? ¡Léelo, no seas muggle!
⚡️
1 abrazos
¡Hola!
ResponderEliminarSabes qué a principios de año me puse como meta leer la saga, así que tengo muchas, pero MUCHAS ganas de leerla, pero me desanima un poco el hecho de que tendré que hacerlo en digital porque no los tengo en formato físico. En enero empecé con "La piedra filosofal", pero se me hizo tan incómodo leer en digital (en el notebook además) que al final creo que no lo terminé. Así que ando buscando ganas de volver a empezar o simplemente pedir los libros a alguna biblioteca.
Me alegra que a pesar de que sea un saga que tantos han leído, aún se hagan reseñas sobre ella para los que aún no hemos comenzado.
Un abrazo desde Mil Jeroglíficos !