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Hasta que el viento te devuelva la sonrisa (Alexandra Roma)
17 junioHasta que el viento te devuelva la sonrisa (Plataforma Neo, 2017) ha sido la novela ganadora de la quinta edición del Premio Literario La Caixa / Plataforma. Es la primera vez que leo algo de Alexandra Roma, pero tengo clarísimo que no va a ser la última: la montaña rusa de sensaciones por las que pasan sus personajes también la vivimos nosotros. Mucho. Demasiado —doy fe—. No sé si ocurre en todas sus obras, o sólo en esta, así que quiero descubrirlo. Lo que tengo claro por ahora es que el premio ha sido merecido.
¿Qué decirte de Hasta que el viento te devuelva la sonrisa? Para empezar, que es increíble todo lo que te hace sentir. En serio: prepárate para tener la piel de gallina durante bastantes líneas. Palabrita. ¿Por qué? Sobre todo, porque empatizas muchísimo con los personajes. Es uno de esos libros que te traspasa, se adueña de una parte de ti, te invita a amar, a quererte a ti mismo, a luchar, a salir, a superarte, a curarte, a recomponerte, a seguir.
La novela de Alexandra nos cuenta la historia de April, pero también la de Sam y de Sebastian. April es animadora, es la reina del baile y, en pocas palabras, lo tiene todo. Vale, esta descripción te puede echar para atrás en un primer momento —a mí me sucedió—, pero espera: no es la típica estudiante popular. No es superficial, sino auténtica. Y sueña con ser abogada, con amar, con ser amada, con ir a la universidad hasta que ocurre... eso.
¿Qué pasaría si ese futuro que anhelas y que pareces rozar con los dedos un día, de repente, se desvanece? ¿Qué hacer cuando la vida te golpea, te zarandea? ¿Alguna vez te has sentido paralizado? ¿Y aturdido? ¿Alguna vez te ha superado lo que estaba ocurriéndote? Este libro parte de la representación del amor, bastante bien construida, para enfrentarse con el que creo que es el segundo gran tema: la superación.
Tras un trágico suceso, April cae en depresión. Su presente está en ruinas y ya no es capaz de pensar en futuro, así que se aferra a lo que le queda: los recuerdos. Puede que, a veces, cuando estamos desencantados de lo que nos rodea, nosotros también lo hagamos. Pero no podemos vivir así siempre. Ella se aleja de sus amigos, de sus sueños; paraliza su vida, por llamarlo de algún modo. Pero llega un momento en el que debemos decidir: o apagamos los sentimientos, aunque sea imposible, tiramos la toalla y escondemos la cabeza como las avestruces, o elegimos seguir. Avanzar.
En ese instante nadie puede ayudarnos; sólo nosotros podemos enfrentarnos a todo, a ese futuro incierto, a la situación que sea, independientemente de lo que nos haya sido arrebatado. A pesar de las cicatrices que nos acompañarán hasta el final de nuestros días.
«A veces es necesario romperse en mil pedazos para poder reconstruirse en una figura nueva»
No es una historia de amor empalagosa. Es una historia de la vida, de cómo a veces nos creemos eternos, invencibles, creemos que las fatalidades siempre las vamos a observar como espectadores, y no. A lo mejor un simple segundo lo estropea todo. A lo mejor un segundo cambia tu existencia por completo.
Planificamos el futuro y no vivimos nunca el presente. Pensamos demasiado en lo que pasó y en lo que pasará cuando lo importante es lo que está pasando. Todo eso se critica en Hasta que el viento te devuelva la sonrisa, y se hace desde dentro, reflejando muy bien qué es lo verdaderamente importante: apreciar los momentos, el día a día, la gente que tenemos alrededor, hacer lo que sintamos. Un libro sobre segundas oportunidades, sobre personas que se pierden, que se encuentran. Un canto a la esperanza, a la vida, y a las ganas de aprovecharla.
Planificamos el futuro y no vivimos nunca el presente. Pensamos demasiado en lo que pasó y en lo que pasará cuando lo importante es lo que está pasando. Todo eso se critica en Hasta que el viento te devuelva la sonrisa, y se hace desde dentro, reflejando muy bien qué es lo verdaderamente importante: apreciar los momentos, el día a día, la gente que tenemos alrededor, hacer lo que sintamos. Un libro sobre segundas oportunidades, sobre personas que se pierden, que se encuentran. Un canto a la esperanza, a la vida, y a las ganas de aprovecharla.
El primer capítulo me pareció genial, me dejó con muchísimas ganas de saber más, y eso siempre es una buena señal. Pero, ¿por qué me llegó tanto? En mi empeño por buscar una razón más objetiva, he de decir que la estructura de la novela ha sido todo un acierto. Hasta que el viento te devuelva la sonrisa comienza in media res, es decir, en medio de la historia. ¿Comenzar en un punto intermedio hace que demos algo por hecho? Error. Porque a partir de aquí, la autora se desenvuelve muy bien con los tiempos narrativos e introduce varios giros que, ojo cuidado, te hacen caerte para atrás.
Además, hablando de tiempos narrativos: la obra está dividida en tres partes y hay varios narradores, tres concretamente, cuyas voces se van alternando hasta entremezclarse de una manera espectacular. Así, desde el momento actual se van sucediendo analepsis, de manera que pasado y presente se unen.
La manera de contar de Roma me parece muy ágil, muy activa. Es una autora que narra los acontecimientos con muchísima delicadeza y, además, ver la historia desde diferentes ojos aparte de ofrecerte una nueva perspectiva, en algunos casos te demuestra que lo que ya sabías es, más bien, lo que creías saber.
La voz cantante la llevan los personajes. Siempre me he considerado una lectora que se fija mucho en ese aspecto, y si flaquean... Meh, mal vamos. Por eso me alegra haber comprobado que en este caso no ha sido así: son personajes vivos, creíbles, humanos. No hay acciones forzadas y, por supuesto, no hay instalove(¡gracias a los dioses!): todo son relaciones que van cuajando, como lo haría cualquier relación.
April: La conocemos en un momento en el que está dolida, en contra del mundo, esperando a que cierta personita se recupere. April es un personaje herido, frustrado, pero que te transmite mucho, sobre todo sus ganas de volver a ser feliz, a pesar de ese dolor que la rompe en dos y la cubre de amargura. A pesar de todo, te habla con mucha fuerza. De verdad, me ha gustado mucho su evolución a lo largo de la novela.
Sam: un chico tierno, inocente, intelectual, al que le gusta ayudar a los demás. Se desvive por ellos, y por April, por cuidarla, y no juzga. Es un personaje humano y, personalmente, ha sido de mis favoritos.
Sebastian: Para mí, April ha sido importante, Sam me ha gustado más y Sebastian ha sido EL personajazo, y eso que cuando apareció en escena tuve la impresión de que era un personaje que no pintaba nada y que entorpecía la historia, que iba a provocar un desenlace de lo más tópico... no pude estar más equivocada, y ¡cómo me alegro por ello! Es un personaje que lo ha pasado mal en la vida pero que saca la furia y el dolor que lleva de una manera muy diferente a la de April. Sebastian, a grandes rasgos, es alguien que se ha roto y descompuesto tantas veces que puede tener la fórmula para que ella también lo logre.
En definitiva, es una dosis de realidad, un libro que te hace romper a llorar muchísimas veces, pero también te abre los ojos y te devuelve, de manera increíble, una sonrisa de esas que se guardan durante mucho tiempo. Creo que es una obra que les va a gustar mucho a personas que se sienten rotas o se han sentido perdidas en algún momento de la vida. Must read!
Además, hablando de tiempos narrativos: la obra está dividida en tres partes y hay varios narradores, tres concretamente, cuyas voces se van alternando hasta entremezclarse de una manera espectacular. Así, desde el momento actual se van sucediendo analepsis, de manera que pasado y presente se unen.
La manera de contar de Roma me parece muy ágil, muy activa. Es una autora que narra los acontecimientos con muchísima delicadeza y, además, ver la historia desde diferentes ojos aparte de ofrecerte una nueva perspectiva, en algunos casos te demuestra que lo que ya sabías es, más bien, lo que creías saber.
La voz cantante la llevan los personajes. Siempre me he considerado una lectora que se fija mucho en ese aspecto, y si flaquean... Meh, mal vamos. Por eso me alegra haber comprobado que en este caso no ha sido así: son personajes vivos, creíbles, humanos. No hay acciones forzadas y, por supuesto, no hay instalove
April: La conocemos en un momento en el que está dolida, en contra del mundo, esperando a que cierta personita se recupere. April es un personaje herido, frustrado, pero que te transmite mucho, sobre todo sus ganas de volver a ser feliz, a pesar de ese dolor que la rompe en dos y la cubre de amargura. A pesar de todo, te habla con mucha fuerza. De verdad, me ha gustado mucho su evolución a lo largo de la novela.
Sam: un chico tierno, inocente, intelectual, al que le gusta ayudar a los demás. Se desvive por ellos, y por April, por cuidarla, y no juzga. Es un personaje humano y, personalmente, ha sido de mis favoritos.
Sebastian: Para mí, April ha sido importante, Sam me ha gustado más y Sebastian ha sido EL personajazo, y eso que cuando apareció en escena tuve la impresión de que era un personaje que no pintaba nada y que entorpecía la historia, que iba a provocar un desenlace de lo más tópico... no pude estar más equivocada, y ¡cómo me alegro por ello! Es un personaje que lo ha pasado mal en la vida pero que saca la furia y el dolor que lleva de una manera muy diferente a la de April. Sebastian, a grandes rasgos, es alguien que se ha roto y descompuesto tantas veces que puede tener la fórmula para que ella también lo logre.
En definitiva, es una dosis de realidad, un libro que te hace romper a llorar muchísimas veces, pero también te abre los ojos y te devuelve, de manera increíble, una sonrisa de esas que se guardan durante mucho tiempo. Creo que es una obra que les va a gustar mucho a personas que se sienten rotas o se han sentido perdidas en algún momento de la vida. Must read!
✧✧✧{Podéis leer el primer capítulo AQUÍ}
Puntuación
★★★★½
✧ «La gente muere constantemente. En casa, en el trabajo, riendo, llorando, da igual. En cualquier lugar. La muerte espera entre bambalinas y decide cuándo es tu acto final sin previo aviso. No puedes evitarla, pero es que, además, tú la estás evitando uniéndote a ella en tu nuevo día a día en el que estás prescindiendo de todo lo que vale la pena en este mundo. Vivir no es sólo respirar. Es mucho más. Tú lo sabías».
✧ «Ese día observé por primera vez a April y me di cuenta de que a veces no hace falta llegar a hablar para saber un millón de cosas de otra persona, que unos ojos son capaces de contar una historia y, para mi propio disgusto, me interesaba la suya».
¿Qué os parece? ¿Lo habéis leído? ¿Os gustan este tipo de historias? Contadme, contadme.
7 abrazos
Holaaa!!!
ResponderEliminarHe odio cosas muy buenas de este libro!! POR AHORA lo dejaré pasar, pero sin duda lo tengo pendiente! GRACIAS POR LA RESEÑA!!!
Besos!
¡Hola!
ResponderEliminarNo había oido hablar de esta novela, pero suena muy interesante. Me la voy a apuntar para leerla pronto:D
¡Besos!
Hola!!
ResponderEliminarLe tengo muchas a este libro y la portada es muy bonita.
Un saludo :)
Hola!
ResponderEliminarNo puedo estar más de acuerdo, es una historia impresionante!! A mí también me pareció un acierto la estructura y los narradores, y por supuesto, Sebastian, madre mía!! un personaje súper completo...
va a ser uno de los mejores del año, seguro!
un beso
S
¡Hola, guapa!
ResponderEliminarEs la primera reseña que leo sobre este libro... su portada me llamaba la atención pero ahora que sé sobre que trata y demás me lo voy a apuntar para leerlo cuando pueda ya son ese tipo de historias que me suelen gustar mucho jeje
Besitos
Guau, vaya pedazo de reseña. No paro de leer cosas buenas de este libro, y me alegro, porque el ganador del año pasado fue muy polémico y en general no gustó. Espero poder leer pronto :)
ResponderEliminar¡Hola!
ResponderEliminarHas puesto tanta pasión al hablar de este libro que me has dado muchas ganas de leerlo. Espero hacerme con el pronto
¡Un beso!